Ya he llegado a Barcelona. Bueno, en realidad estoy en Sant Andreu de
la Barca, un pueblo (iba a decir pueblecito...) que está a
unos pocos
kilómetros. He llegado a las once de la noche.
Salí de
Ávila a las nueve y media de la mañana con 4
ºC.
Antes de salir la he hecho una foto:
Luego sin volver
más la
vista atrás, he hecho una foto al
cuentakilómetros (ya
comprobaremos la cantidad de kilómetros que me voy a
hacer...) y he
comenzado el viaje.
Ha sido un viaje
tranquilito, con algún atasco en Madrid y sin
sobresaltos. De momento el coche aguanta bien. A la hora de comer he
llegado a Zaragoza, y me ha costado llegar a la casa de
Héctor, porque
está toda la ciudad patas arriba, con las obras del AVE y de
la Expo.
Nos hemos comido un Kebap en un nuevo restaurante turco que han abierto
debajo de su casa y luego, me ha enseñado el centro:
Paseando por la
ciudad (en la
calle predicadores) nos hemos encontrado con Ángela, una de
las
chicas que estaba de erasmus en Dresde y que vive en Alicante (el mundo
es un pañuelo), que estaba de guía de una
excursión de jubilados. ¡Qué sorpresa!.
Después hemos ido a comprar unos libros y luego, he esperado
a
mi prima Cristina, que me ha llamado diciendo que venía de
Tarragona. Ya era de noche cuando he salido hacia Barcelona, he cogido
la autopista AP-2, que es una clavada (19 €) y he llegado en
unas
dos horas y media. He guardado el coche en el garaje de la casa de mi
prima Isabel, porque dice que si me ven la matricula de
Ávila,
me rajan las ruedas (no sé si hablaba en serio).
Mañana
me espera todo el camino hasta Suiza. No sigo escribiendo
más,
la morriña me puede...
Publicado el 29 de septiembre de 2007.